Sé que empezaste con entusiasmo, devorando cada página de esa historia, cada palabra, con la esperanza de que la trama te atrapara hasta el final.
Pero entonces, algo pasa. La historia que una vez te cautivó, ahora te deja mirando al techo, preguntándote si vale la pena seguir hasta el final. «Quizás mejore«, te dices, con ese optimismo de quien no quiere abandonar el barco a medio camino.
El encanto del comienzo
Al principio, todo es novedad y entusiasmo. Te sumerges en la relación con la misma pasión con la que abres un libro nuevo, esperando descubrir mundos, emociones, y promesas de un viaje inolvidable. Al igual que con un bestseller recomendado por todos, te lanzas de cabeza, convencido de que será una experiencia transformadora.
… pero llega el desgaste y las dudas
Las páginas empiezan a pesar. Lo que una vez fue novedad ahora se siente repetitivo, y los defectos que pasaste por alto empiezan a hacerse más evidentes.
Te encuentras a ti mismo justificando por qué sigues leyendo: «Ya he invertido tanto tiempo», «Tal vez solo sea un capítulo aburrido», «Al principio me encantaba». En las relaciones, estas excusas suenan familiarmente dolorosas.
Dejar un libro a medias puede sentirse como una pequeña derrota personal, un proyecto inacabado. Y en las relaciones, esa sensación se amplifica. Nos aferramos a los buenos momentos del principio, esperando que de alguna manera, la magia regrese, incluso cuando sabemos, en el fondo, que la historia ya no nos satisface.
¿Y ahora qué?
Reconoce tus Sentimientos: Como con cualquier buen libro, es vital ser honesto sobre cómo te sientes. Si la historia ya no te llena, admítelo. En las relaciones, esto significa aceptar que algo no va bien, que tus necesidades emocionales quizás no estén siendo satisfechas.
Evalúa tu Inversión: ¿Vale la pena seguir invirtiendo en algo que ya no te hace feliz? Recuerda, el tiempo que ya has pasado no volverá, pero el tiempo futuro es una hoja en blanco.
Toma una Decisión Basada en Tus Valores: Pregúntate qué tipo de historia quieres vivir y qué tipo de protagonista quieres ser. Si el libro de tu relación actual no refleja eso, quizás sea hora de buscar una nueva historia que sí lo haga.
El Arte de Soltar: Aprender a dejar ir es como cerrar un libro que no terminaremos. Es un acto de coraje, de reconocer que estamos listos para nuevas historias que resonarán más con nuestro ser.
Abre un Nuevo Capítulo: Cada final es también un comienzo. Permitirte cerrar un libro es darte la oportunidad de descubrir nuevos mundos, nuevas relaciones que estén alineadas con quién eres y quién deseas ser.
Tu vida está repleta de historias esperando ser vividas. Algunas te enseñarán lecciones valiosas, otras te dejarán con el corazón lleno. Muchas de esas historia, simplemente, no son para ti. Y está bien. La clave está en saber cuándo una historia ha cumplido su propósito en nuestras vidas y tener la valentía de decir: «Este capítulo ha terminado. ¿Qué sigue?»
Coach Personal acreditado por ICF. Máster en Psicología Clínica y Recursos Humanos. Consulta Presencial y Online en Santa Cruz de Tenerife. Te acompaño en la búsqueda de tu Plan de Acción. Información de Contacto.
